El sector tecnológico americano se lo reparten entre Apple y Microsoft, con la nueva clasificación GICS. Ambos ostentan un 20%. Por detrás se encuentran Cisco, Visa o Mastercard con pesos del 5%. Las valoraciones siguen siendo exigentes, como ocurría cuando todas las FAANG estaban incluidas, aunque en este caso estamos ante compañías consolidadas y por tanto más previsibles. Como vemos el mayor problema lo tenemos en la tracción de los beneficios, que con unos márgenes que sufren y con ventas que crecen menos se ponen en entredicho. Por todo ello, tenemos que tener muy claro los valores que queremos y comprarlos en puntos debilidad. Entre ellos destacan Microsoft, Visa y Cisco, aunque esta última es la única que de momento nos ha dado opción.
Cisco, la opción en el sector tecnológico americano
Aprovechamos las caídas tras resultados para volver a incorporarnos a una de nuestras tecnológicas favoritas. A pesar de presentar unos resultados más que decentes, la compañía comunicó un incremento de costes derivados de sus proveedores en China, lo que ha hecho que los márgenes se hayan quedado algo estancados. Aún así, la cartera de pedidos sigue creciendo, y lo hace además en los segmentos de mayor margen por lo que prevemos una mejora de los mismos, y que apoyará el crecimiento del 2%-4% en ingresos que tiene el consenso con cierto riesgo al alza. A pesar de un fuerte gasto en recompra de acciones que ha consumido parte de su caja y estropeado algo los ratios de deuda, el perfil de generación de flujo de caja no ha cambiado.
Tras un comienzo de año liderando las subidas en el índice tecnológico americano, desde Julio no ha hecho más que caer y acumula ya el 20% retroceso desde sus máximos de año. Un retroceso en el precio que no se ha visto acompañado de una rebaja de las estimaciones, lo que la deja un ratio de beneficios similar al del año 2017, en donde el Beneficio Por Acción (BPA) era un 30% menor del que se espera para este año. Por valoración sigue siendo una de las compañías más baratas en el sector a pesar de la subida experimentada estos dos últimos años lo que nos anima a empezar a comprar estos precios para volverla a incorporarla a las carteras.