La concienciación social y empresarial enfocada a la sostenibilidad va avanzando, al igual que en el mundo financiero, donde sabemos que es fundamental la generación de impacto. Por esta razón, una de las tendencias de inversión de la ESG que está ganando peso en la industria financiera -y, lo más importante, consiguiendo resultados- es el engagement con las compañías.
Una técnica basada en el diálogo con las compañías para conseguir compromisos de futuro, adopción de nuevas prácticas y mejoras que se adecúen a la consecución y cumplimiento de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Ejercer el derecho de voto en las juntas de accionistas, mantener reuniones con los más altos directivos de las compañías y conseguir compromisos de mejora por parte de los equipos directivos, son algunas de las prácticas más eficientes para generar impacto.
En nuestro fondo de inversión gestionado con criterios ESG -Sigma Global Sustainable Impact (GSI)– trabajamos en la generación de impacto a través de la inversión en activos como el fondo BMO SDG Engagement Global Equity Fund, casa con más de 30 años de experiencia en el mundo de la sostenibilidad y que cuenta con equipos especializados en la consultoría de engagement, que ofrecen también a terceros. Este fondo invierte en compañías globales cuyo objetivo es conseguir la apreciación en el largo plazo, reducir el riesgo y promover que se contribuya positivamente a los problemas medioambientales y sociales generales.