Tras un 2022 de grandes cambios en el mercado, hoy el debate en Europa se centra en dónde estará el terminal rate del BCE, donde la inflación y el crecimiento mostrarán el camino que siga el BCE.
Con todo ello, esperamos un año de caídas de la inflación por efectos base en energía y moderación de problemas en la cadena de suministro. Los datos de inflación muestran desaceleración, pero debemos prestar atención a la core, que excluye energía, y que sigue repuntando. Veremos caídas especialmente en marzo, mayo y junio.
Por su parte, experimentaremos crecimiento en la economía de la eurozona, donde se evitará una recesión invernal. La caída de los costes energéticos ha evitado el peor escenario, ayudando a Europa a recuperar cierto optimismo con revisiones al alza. Sin embargo, en EEUU veremos un empeoramiento de las perspectivas de crecimiento desde un pesimismo extremo, provocando un peor comportamiento de las bolsas estadounidenses. Así, Europa experimenta las mayores entradas en renta variable desde junio de 2021.
Debemos estar atentos a los nuevos datos de EEUU en los próximos días: hoy, variaciones semanales de desempleo y bienes duraderos; y mañana, nuevos datos de la Universidad de Michigan y el Core PCE, que acelera su moderación, llevándose a la FED a un “terminal rate” de nuevo por debajo del 5%, actual en el 4,88%
Al BCE le queda trabajo por hacer: 50 pbs en febrero parecen seguros, y el mercado descuenta otros 75/100 pbs hasta julio. A la FED ta sólo le descuentan 50 pbs más hasta julio de 2023. Todo ello mientras los mercados siguen en modo rally con volatilidades abajo en bonos y divisas.