/ Mercado laboral americano clave: ahí radican los riesgos macro

Múltiples y claras fueron las referencias de Powell al mercado laboral en Jackson Hole: “no perseguimos ni damos la bienvenida a un mayor deterioro del mercado laboral”; “haremos todo lo que sea necesario para apoyar la fortaleza del empleo”; “parece poco probable que el mercado laboral sea una fuente de elevadas presiones inflacionistas en un futuro próximo”. “El enfriamiento de las condiciones del mercado laboral es inequívoco”. Habrá que vigilar que la moderación del empleo no se transforme en debilidad del mismo. No hay despidos, sí aumento de la población activa y ralentización de la contratación, y es generalizado por estados.

Por lo demás, ni encuestas ni datos muestran señales inequívocas de recesión, algunos sí de desaceleración (por ejemplo: ISM manufacturero). El consumo se mantiene como apoyo, a costa, eso sí, de una tasa de ahorro decreciente y próxima a mínimos. Aterrizaje suave que sigue siendo escenario central.

/ En Europa, ¿menos crecimiento de lo esperado?

Actividad europea menos dinámica de lo esperable, con continuidad de los brotes verdes de las encuestas (PMIs) y de algunos datos de consumo, pero debilidad del lado manufacturero. Y no sólo lo dice la macro, sino la micro, con problemas de algunas empresas alemanas de autos.

/ La inflación pasa a segundo plano pero no faltan riesgos para la tendencia desinflacionista

En los últimos meses, la economía americana ha vuelto a la senda desinflacionista, con un PCE core en lecturas del 2,6% YoY. Y, mejor aún, algunos de los indicadores adelantados sugieren que vaya a continuar en ella. Así, los nuevos alquileres han venido a la baja, siendo la vivienda uno de los componentes clave del IPC americano. También el mercado laboral da señales de menores presiones para los precios.

Como lo es el hecho de que la presión desde los servicios continúa, y no es un factor exclusivamente europeo, sino un fenómeno mundial. O el proteccionismo creciente, con restricciones a las exportaciones afectando de forma especial a un 25% de las materias primas críticas.