El sector de la gestión de activos ha asumido que la digitalización es fundamental para el futuro de la industria, por lo que resulta cada vez más relevante conocer las preferencias de los clientes a la hora de relacionarse con la entidad y personas que gestionan sus inversiones.
El último informe de Cap Gemini ‘La gestión de activos en la era digital’ muestra que una mayoría de los clientes de alto patrimonio apuesta porque la mayor parte de las relaciones en la gestión de sus inversiones será digital. Así lo estima un 62% en Europa, un 58% en Estados Unidos y hasta un 83% en Asia. Porcentajes que son más elevados entre los inversores más jóvenes, que constituirán el grueso de la industria en unos años.
La demanda de canales digitales es consistente a través de las distintas bandas de riqueza, según señala el estudio, desmintiendo el mito de que aquellos inversores que poseen más riqueza no están interesados en el formato digital.
Las interacciones cara a cara, que han sido durante mucho tiempo el estándar de la industria, van a continuar prevaleciendo, sobre todo para generar compromiso y fidelización entre cliente y gestor, si bien el margen de preferencia por este tipo de interacción se está estrechando y se irá reduciendo en próximas generaciones, según apuntan los datos recabados, especialmente como canal de información y de transacción.