Basándonos en la comparación de los datos de la cuenta corriente del Banco de Japón (BoJ), alcanzamos a concluir que la autoridad monetaria japonesa se gastó 13.5 mil millones de dólares adicionales el pasado viernes para defender el Yen. Ya el jueves supimos que el banco central había intervenido el mercado cambiario con unos USD21bn de sus reservas vendidas. Estas intervenciones, que sospechábamos podrían tener lugar una vez que el departamento del Tesoro en EEUU puso a Japón en la lista de “manipuladores de moneda”, están marcando un punto de inflexión en la trayectoria de la moneda que, como podrán observar en el gráfico, ha empezado a rectificar el rumbo resultando en una apreciación del yen del 3.8% en 7 días.

Con estas intervenciones, las autoridades están llevando a cabo una acción para mantener “a raya” a los traders y short sellers, y han venido incluso acompañadas de advertencias verbales. Creemos que esto va a continuar así, despertando una sensación de seguridad entre los fabricantes japoneses con operaciones fuera (desde las que llevan más de seis meses sin repatriar divisas fruto de sus resultados en el extranjero). De consolidarse esa sensación de que el BoJ ha formado un suelo en el yen (PUT), sospechamos que las repatriaciones se podrían acelerar y llevar a la divisa japonesa a niveles cercanos a 145.

Son noticias favorables para quien, como nosotros, mantenga exposición al mercado japonés en moneda local.